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Los tres tenores
Estamos en junio de 1997, a 60 años del "Carmina Burana".
Comienza la temporada estival de Festivales.
Narciso Yepes había fallecido el 2 de mayo, tras una larga enfermedad.
En el CD de este mes de junio se editaba parte de la obra de Ravel: su famoso Bolero, Ma mère l´oye, Pavana para una Infata difunta, Le tambeau de Couperin y Menuet Antique.
Esto daba motivo a que se hablara de Ravel, cual hace Leonardo Pinzauti, que resaltaba que todas las obras del compositor son de una rara perfección formal, tras la cual se muestran un brillante intelecto y una vibrante e inquieta imaginación. Su escritura musical, precisa hasta en los mínimos detalles, como si de un relojero se tratara, es el fiel reflejo de esa transparencia típicamente francesa.
Paolo Castoldi habla, por el mismo motivo del CD, del caballero de la Academia que era Sir Neville Marriner. Su nombre estaba indisolublemente unido al de la Academy of St. Martin in-the-Fields, la orquesta de cámara más grabada del mundo, que fundó en 1959.
Entre los Festivalesd de España de este verano, lo más selecto estaba en Granada, Santander y Peralada.
Mariu Mariam escribía sobre Los 3 Tenores, mezcla de arte, espectáculo y negocio, que despertaba pasiones. 2000 pesetas era el precio más barato para escucharles en vivo, llegando incluso a pagarse 28.500 pesetas, y no de reventa.
Nuria Álvarez escribía sobre cómo se compone una obra de encargo, que era la forma de mecenazgo más importante; una forma de generar cultura a la que entonces se abría el Festival de verano de Barcelona.
Alfonso Gil González
Bolero
Ma mère l´oye
Pavana para una Infanta difunta
Le tambeau de Couperin
Minuet Antique
