Música animalista
En numerosas miniaturas medievales aparecen animales portando instrumentos musicales o danzando. Su presencia responde a una tradición vinculada a la simbología religiosa y moral.
Pero el Medievo no fue sino el puente de paso de un legado de la antigua mitología, rica en esa fusión de animales y de música. Vemos que el arpa se identifica con un caballo blanco o con el cisne. O arpistas con cabeza de perro, o tañedores del tambor con fisonomía de ciervo.
La imitación de los movimientos y los sonidos de los animales fue un recurso común a muchos pueblos que asociaron la misticidad de la música con el poder simbólico del animal. Veamos algunos ejemplos:
Carnaval de los animales
Vuelo del moscardón
Concierto El Jilguero
Golondrinas de aldea