Anton Bruckner
El sinfonismo de Bruckner (1824-1896) es profundamente personal y no puede valorarse con criterios aplicables a Beethoven o Brahms.
Bruckner ofrece una experiencia sinfónica única, basada en la ampliación de las formas, la homogeneidad de estilo y la orquestación en bloques compactos de gran potencia sonora.
La "Sinfonía n. 4" tuvo un proceso largo, desde 1874 a 1886.
En 1927 se fundó la Sociedad Internacional Bruckner con el propósito de publicar lo más fielmente posible las obras del compositor.