Elogio a la vida sencilla
Vida inquieta, frenesí!
de la ambición desmedida...
¡Qué mal comprende la vida
el que la comprende así!
La vida es soplo de hielo
que va marchitando flores;
no la riegues con sudores
no la labres con desvelo;
la vida no lo merece;
que esa ambición desmediuda
es planta que no florece
en los huertos de la vida.
Necio es quien lucha y se afana
de su porvenir en pos:
gana hoy pan... y deja a Dios
el cuidado de mañana...
José María Pemán
Poeta y dramaturgo del siglo XX