Desde mi celda doméstica
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martes, 6 de octubre de 2015

LÁMINA Y MENSAJE (124)

Llamada a los primeros discípulos


Los evangelistas sinópticos hablan de cómo fue la primera llamada al seguimiento de Jesús. Éste caminaba a orillas del mar de Galilea, y vio que Simón Pedro y su hermano Andrés estaban pescando con redes. Les dijo: Veníos conmigo y os haré pescadores de hombres. Y ellos, dejando las redes, lo siguieron. Vio, después, a otros dos, Santiago y Juan, que estaban arreglando las redes con su padre Zabedeo. Y ellos, al instante, dejaron las redes y a su padre y se fueron con Jesús.
¿Es posible encontrarse con Cristo y no seguirle?
¿Es posible seguirle y no dejar todo lo demás?
¿Es posible dejarlo todo sin ser llamado?
¿Es posible ser llamado sin amor?
NO ES POSIBLE.

Alfonso Gil González
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