Desde mi celda doméstica
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miércoles, 22 de junio de 2016

MIS APUNTES PATRIOS (XXXVI)

La mentira institucional


Hoy por hoy, ya sabéis que la política es la mentira institucional más grande. Y como la política se alimenta de partidos políticos, habrá que deducir que ellos son la fuente de tal mentira. Yo, al menos, no creo en esa política. Estamos a un paso de la Elecciones Generales del 26 de junio. Voy a votar, os lo digo sinceramente, lo que me parece menos malo. Pero sueño con el día en que nuestro Parlamento sólo esté representado por la Familia, el Trabajo, el Municipio, realidades todas ellas naturales y que, en verdad, nos sitúan en nuestra concretez humana y cívica. Lo de derechas e izquierdas es un cuento chino y, a estas alturas, parece extraño que todavía haya gente que crea en ello. Los populismos son otro cuento, pues resulta que sus propagandistas siempre han vivido al margen del pueblo, y viven. Porque, ¿qué es el pueblo si no aquellas familias enraizadas en un municipio que viven o desean vivir de su trabajo? Por tanto, todas las demás representatividades que se inventan los políticos no son sino cuento.
Yo voy a ir a votar. Tú también debes ir a votar. Pero ¡cuidado con lo que votas! No te dejes llevar de las apariencias. Sé realista. No te tragues quimeras. No creas a los que no creen. No temas a los que no temen. Busca con tu voto el bien general de España. Piensa en qué país quieres que vivan felices tus hijos y nietos, o tus padres y abuelos. Usa la cabeza. Mira hacia el futuro, sin olvidar el presente. Y vota, sí. Vota lo menos malo, porque lo mejor sería que no fuera necesario votar, que nuestros representantes no nos engañaran, que la Paz, la Unidad, la Solidaridad, el Trabajo fueran las únicas preocupaciones de quienes dicen velar por el bien de la ciudadanía. No votes a los que medran, a los que buscan poder, a los que quieren enriquecerse. Vota a los que tienen vocación y se sienten llamados a servir a sus paisanos, a sus conciudadanos, viendo en ello su mejor premio.
¡Y que Dios reparta suerte!


Alfonso Gil González

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