ABRAM
Génesis 12
Antes que Abrahán, llamóse Abran,
y hubo de partir- su fe tenía-,
a tierras del Egipto, y temía
que a su mujer, por su beldad, raptaran.
El hambre obligó que continuaran
más allá de Siquem, donde dormía,
donde oyó que Yahvé les bendecía
lo que ellos jamás nunca soñaran.
Aunque Dios le bendijo por su esposa,
pensando el Faraón era su hermana,
a Abran reprendió su voz dolosa.
Así, toda riqueza que nos mana
al tramar una vida venturosa,
al exilio nos manda de mal gana.
Alfonso Gil González