Desde mi celda doméstica
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jueves, 7 de mayo de 2015

LA COCINA DE NUESTRAS ABUELAS


La cocina de nuestras queridas abuelas


Para ponerme a escribir este Prólogo he conectado, adrede, con la música de Johann Sebastián Bach. Él, como nuestras queridas abuelas, nos hace referencia a lo puro, a lo auténtico, que cuadra perfectamente con lo sencillo de su faena culinaria. Con este libro de cocina quiere rendir el autor un homenaje a nuestras abuelas. Lógicamente, no está dirigido a ellas. Las abuelas han sido y son las maestras de nuestro buen comer. Es por eso que se las llevan los demonios cuando ven que a sus hijos y nietos –sobre todo, éstos, y no todos- les da por ingerir alimentos prefabricados, mantenidos forzosamente con conservantes de caducidad casi inmediata, que favorecen, sí, el engorde, pero que, al mismo ritmo, van minando las defensas de un organismo, tan delicado y perfecto como el del ser humano, provocando desequilibrios que, quiérase o no, precipitan la llegada de la no sé si llamarla, en este caso, hermana muerte.
Nuestras abuelas –el autor nombra a Amparo, Trinidad, Angustias, Paquita, Francisca, Remedios, Antonia, Nieves, Casimira, Tomasa, Monserrat, Dolores, Magdalena, Maravillas, Amalia, Esmeralda, Eulalia, Tomasica, Carmen, Benita, Irene, Inés, Paca, Carmela, Matilde, Juana, Piedad, Margarita, María Jesús, Ana María, Paqui, Anita, Natalia, Milagros, Patricia, Mercedes, Gloria, Carolina, María Antonia, Emilia, Esmeralda, Luisa, Araceli, Fátima, Belén, Daniela, Casilda, Eusebia, Lourdes, Rosa, María, Lucía, Marta, Encarnación, Maruja, Lorenza, Manolita, Ágata, Genoveva, Guillermina, Rosita, Paloma, Petra, y al granjero Matías-  disponían de productos naturales, no sulfatados. Llevaban en sí el sello perecedero de la naturaleza misma, siempre renovable. Carentes, en su mayoría, de estudios especializados, observaban el comportamiento de lo circundante, incluidos los frutos de la tierra, y se las ingeniaban para que éstos llegaran a la cocina y a los suyos en las mejores condiciones posibles. El aceite era aceite; el pan, pan; los tomates, tomates; el agua, agua; el vino, vino; las legumbres, legumbres; la fruta, fruta… Hoy, casi todo tiene la misma apariencia de aquello, mas no es aquello. La crisis que nos aqueja tan angustiosamente ya se inició con la propia de la Naturaleza. Malos hijos hemos sido con ella, precipitando a los nuestros y a nuestros nietos a imprevisibles modificaciones o deformaciones fisiológicas, a causa de una alimentación mal cosechada y peor digerida.
Este libro de Navarro Belmonte, el quinto que he tenido el placer de prologarle, es una auténtica recuperación de aquel sencillo trabajo de “nuestras queridas abuelas”. Si no nos volvemos locos del todo –cosa que me temo- lo ecológico irá avanzando contra el actual deterioro de lo natural y, con ayuda de este magnífico recetario, estas sopas serán verdaderos caldos de pollo, de pescado o de espinacas; las ensaladas y entremeses nos sabrán a gloria; las verduras y legumbres nos recordarán aquellos bellos años de nuestra infancia; los arroces, en sus mil variantes, nos harán bendecir a Calasparra o Valencia, o al mismísimo Japón. Porque todo, aquí, me parece –melómano impenitente- una bella sinfonía, un verdadero concierto con el protagonismo virtuoso de los huevos, de las aves, del marisco, de las pastas, de los postres o de las bebidas. Música oloroso-gustativa en la partitura de este cocinero afincado en Cehegín, que cada día tiene más amigos, pues su bondad personal la envuelve con cuanto elabora y trajina. Muestra de lo cual la tienes, lector(a), en tus manos.   
Ciertamente, este recetario es un bonito homenaje a nuestras queridas ABUELAS, a nuestras GRANDES MADRES, que dirían y dicen los franceses; no a nuestras “grandes progenitoras B”, que nos quieren encasquetar, deteriorando así, como se hace ya casi con todo, el léxico más entrañable. Que este último párrafo de mi prologal escrito se una a la verdadera intención   de  este cocinero andaluz, catalán y murciano: HOMENAJEAR A NUESTRAS QUERIDAS ABUELAS.

Alfonso Gil González



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