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Las ilusiones del Ego
(Primera parte)
En unos hipotéticos ejercicios espirituales, este tema encajaría perfectamente en el "día cuarto", tras haber desarrollado los anteriores temas del "Curso de Milagros". Veamos:
- Podemos hablar desde el Espíritu o desde el ego, según elijamos. Si hablamos desde el espíritu, es que hemos decidido acatar la palabra inspirada que refleja conocimiento. Si hablamos desde el ego, renegamos del conocimiento y nos "des-animamos".
- Nada puede llegar al Espíritu desde el ego, ni nada puede llegar al ego desde el espíritu. El Ego en sí es una contradicción. Nuestro falso ser y el de Dios están en oposición.
- El que enseñes o aprendas no es lo que establece tu valía. Tu valía la estableció Dios.
- Cuando sientas miedo, aquiétate y reconoce que Dios es real, y que tú eres ese Hijo amado en quien Él se complace. No dejes que tu ego refute esto, porque el ego no puede conocer algo que está tan lejos de su alcance como es tu verdadero ser.
- Dios no es el autor del miedo, sino tú. No estamos en paz porque no estamos desempeñando nuestra función. El ego tiene miedo del gozo del espíritu porque, una vez que lo hayas experimentado, dejarás de proteger y atribuirle valor al miedo.
- El ego ha construido para cada uno un hogar mísero e inhóspito. Sólo Dios pudo erigir un hogar digno de su acción creadora.
- Desde tu ego no puedes hacer nada para salvarte o para salvar a otros, pero desde el espíritu puedes hacer cualquier cosa conducente a la salvación.
- Deberíamos recordar: "En este mundo no hay por qué tener tribulaciones, porque yo he vencido al mundo". Por eso es por lo que deberíamos estar animados.
- Todo el mundo inventa un ego o un yo para sí mismo, el cual está sujeto a enormes variaciones. Nuestro propio estado mental es un buen ejemplo de cómo fue inventado el ego.
- Socavar el sistema de pensamiento del ego lo percibimos como un proceso doloroso, pero no hay nada que esté más lejos de la verdad.
Sólo aquellos que tienen una sensación real y duradera de abundancia pueden ser verdaderamente caritativos. Fijaos: "Dar para obtener" es una ley ineludible del ego, que siempre se evalúa en función de otros egos. Por lo tanto, está siempre obsesionado con la idea de escasez, que es la creencia que le dio origen. Su percepción de otros egos como entes reales no es más que un intento de convencerse a sí mismo de que él es real.
- El ego vive literalmente a base de comparaciones. La igualdad es algo que está más allá de lo que puede entender y, por tanto, le es imposible ser caritativo.
- El ego cree que tiene que valerse por sí mismo para todo, lo cual no es más que otra forma de describir cómo cree que él mismo se originó.
- Los mitos y la magia están íntimamente relacionados, ya que los mitos generalmente tienen que ver con el origen del ego, y la magia con los poderes que el ego se atribuye a sí mismo. Esto es bueno recordarlo para purificar nuestra fe.
- Ahora bien, el espíritu es inmortal, y la inmortalidad es un estado permanente.
(continuará)
Alfonso Gil González
- Dios no es el autor del miedo, sino tú. No estamos en paz porque no estamos desempeñando nuestra función. El ego tiene miedo del gozo del espíritu porque, una vez que lo hayas experimentado, dejarás de proteger y atribuirle valor al miedo.
- El ego ha construido para cada uno un hogar mísero e inhóspito. Sólo Dios pudo erigir un hogar digno de su acción creadora.
- Desde tu ego no puedes hacer nada para salvarte o para salvar a otros, pero desde el espíritu puedes hacer cualquier cosa conducente a la salvación.
- Deberíamos recordar: "En este mundo no hay por qué tener tribulaciones, porque yo he vencido al mundo". Por eso es por lo que deberíamos estar animados.
- Todo el mundo inventa un ego o un yo para sí mismo, el cual está sujeto a enormes variaciones. Nuestro propio estado mental es un buen ejemplo de cómo fue inventado el ego.
- Socavar el sistema de pensamiento del ego lo percibimos como un proceso doloroso, pero no hay nada que esté más lejos de la verdad.
Sólo aquellos que tienen una sensación real y duradera de abundancia pueden ser verdaderamente caritativos. Fijaos: "Dar para obtener" es una ley ineludible del ego, que siempre se evalúa en función de otros egos. Por lo tanto, está siempre obsesionado con la idea de escasez, que es la creencia que le dio origen. Su percepción de otros egos como entes reales no es más que un intento de convencerse a sí mismo de que él es real.
- El ego vive literalmente a base de comparaciones. La igualdad es algo que está más allá de lo que puede entender y, por tanto, le es imposible ser caritativo.
- El ego cree que tiene que valerse por sí mismo para todo, lo cual no es más que otra forma de describir cómo cree que él mismo se originó.
- Los mitos y la magia están íntimamente relacionados, ya que los mitos generalmente tienen que ver con el origen del ego, y la magia con los poderes que el ego se atribuye a sí mismo. Esto es bueno recordarlo para purificar nuestra fe.
- Ahora bien, el espíritu es inmortal, y la inmortalidad es un estado permanente.
(continuará)
Alfonso Gil González
