Imágenes de la Iglesia
Joaquín Losada Espinosa es un jesuita gallego, doctor en filosofía y teología, especialista en eclesiología. Hablando con él, decía que las distintas "imágenes" de la Iglesia nacen de su propia autoconciencia a través del tiempo. Son "imágenes históricas" surgidas de esas otras "imágenes esenciales" que reflejan su identidad, tales como "nuevo pueblo de Dios", "cuerpo de Cristo" y "templo del Espíritu".
- ¿Es la Historia un factor de imagen?
- La interpretación del mundo que hace la Iglesia la sitúa a ella misma "ante" el mundo y "en" ese mismo mundo con el se confronta. Su rol social es un rasgo determinante de su propia imagen, que penetra hasta la misma estructura organizativa de la Iglesia, y sin el que no sería creíble.
- Pero vemos que en la Iglesia actual hay varias imágenes de sí misma.
- Efectivamente. Está, por un lado, la Iglesia "exorcista" con su visión pesimista del mundo, con un lenguaje ético, moralizante, discernidor del bien y del mal. Una Iglesia así es expresivamente clerical.
Luego tenemos la Iglesia "arca de salvación". Su lenguaje es apocalíptico, y se sitúa a sí misma fuera del mundo. Es la Iglesia de sacramentos, auxilios espirituales, bendiciones, indulgencias y sufragios por los difuntos. Y, también, de misiones populares y ejercicios espirituales.
Está también la Iglesia "madre y maestra", situación en la que la colocaron las circunstancias socio-políticas que siguieron al hundimiento del Imperio Romano. Europa nace en el seno de la Iglesia. Ella no sólo es depositaria de la verdad revelada, sino la conservadora del saber y de la cultura humana. En este sentido, considera al mundo menor de edad, necesitado de la protección y orientación de la Iglesia. Ese rol de "madre y maestra" ha incrementado su actividad magisterial en dos siglos mucho más que en los dieciocho siglos anteriores. El Magisterio es, de hecho, la cabeza pensante y dirigente de esa imagen de Iglesia.
Últimamente, la Iglesia se va manifestando como "profética y servidora", según el modelo de la primera comunidad cristiana. Tiene una mayor preocupación por la Palabra de Dios y se siente mucho más disponible a las necesidades y exigencias de aquellos a quien desea servir. Hay, por tanto, una mayor atención hacia los pobres, los oprimidos, los pequeños, los sin voz. Tiene conciencia de pertenecer al mundo y de vivir solidariamente con él. Asume, de este modo, un rol de agente de renovación y transformación de la sociedad. Un rol político. Pone especial cuidado en el lenguaje, haciéndolo más accesible al pueblo y a los sencillos, consiguiendo que el Evangelio vuelva a encontrar su gusto original como mensaje de esperanza y de liberación. Es una Iglesia que tiende a una estructura carismática, donde todos tienen sitio y palabra.
- Esto resulta más que interesante.
- Sí, porque a estas "imágenes" de la Iglesia habría que añadir otras muchas en las que la Iglesia actual plasma su identidad. Como la imagen de "Pueblo de Dios", "Cuerpo de Cristo" y "Templo del Espíritu", que insinuabas al principio. Esta nuevas imágenes deben abrirse sin miedo a las necesidades del mundo y responder a sus más serias y profundas exigencias.
Alfonso Gil González