A veces una mirada lo resuelve todo.
Está perdida una sociedad
cuya moral se basa en sentimientos.
Hay tanta infinitud a su alrededor,
que bien puede la Tierra soñarse centro.
La filosofía debe llevar a la sabiduría
y la teología a la santidad.
Las impresiones no son las garantes de la verdad.
No hay una bienaventuranza
para los indolentes.
Por qué poco el hombre pierde su equilibrio.
Querer saber de todo es optar
por no saber de nada.
Si tu voluntad no alcanza la meta
no esperes lo hagan tus caprichos.
Tan torpe es quien practica sin saber
como quien sabe sin practicar.
Todo nuestro espíritu se manifiesta corporalmente.
Un escéptico es un filósofo
con depresión.
Está perdida una sociedad
cuya moral se basa en sentimientos.
Hay tanta infinitud a su alrededor,
que bien puede la Tierra soñarse centro.
La filosofía debe llevar a la sabiduría
y la teología a la santidad.
Las impresiones no son las garantes de la verdad.
No hay una bienaventuranza
para los indolentes.
Por qué poco el hombre pierde su equilibrio.
Querer saber de todo es optar
por no saber de nada.
Si tu voluntad no alcanza la meta
no esperes lo hagan tus caprichos.
Tan torpe es quien practica sin saber
como quien sabe sin practicar.
Todo nuestro espíritu se manifiesta corporalmente.
Un escéptico es un filósofo
con depresión.
Alfonso Gil González