Videos sublimes
Así titulaba yo una serie de grabaciones, tomadas de la TV, en la que se encierran verdaderas joyas del arte musical o documentos extraordinarios de la historia. Recuerdo que, en el primero de estos registros caseros, guardaba la genial interpretación que de la Quinta Sinfonía de Tchaikovsky hacía la extinguida orquesta sinfónica de la URSS, en el Auditorio Nacional de Madrid, ante Sus Majestades, los reyes de España, y ante el presidente ruso Gorbachov, acompañado de su esposa.
Tenía, igualmente, registrado el prólogo a La Atlántida, de Manuel de Falla, en versión del coro y orquesta de la RTVE, dirigidos por Ros Marbá. Pepe Moreno, nuestro amigo de Calasparra, tocaba la flauta. Esto sucedía en el Teatro Monumental de Madrid. Pero, además, interpretaron la Sinfonía Coral, de Claudio Prieto, y el Idilio de Sigfrido, de Richard Wagner, amén de un breve pasaje del Ocaso de los dioses, con la intervención de la soprano Jeannine Altmeyer. Hoy, nuestro amigo calasparreño goza en su pueblo de una merecidísima jubilación.
Recuerdo que, por aquel entonces, también grabé el homenaje que la orquesta filarmónica de Viena tributaba al francés Claude Debussy. Su director, Georges Pretre, nos ofrecía de forma genial las Imágenes para orquesta n.1, Nocturnos, Preludio a la siesta de un fauno y La Mer . Era el año en que dicho director había estado al frente del concierto de Año Nuevo, desde Viena, con la misma centuria. Una auténtica joya.
Pues bien, ese primer vídeo se cierra con la intervención de los Virtuosos del Violín del Teatro Bolshoi de Moscú. Los dirigía uno de sus componentes, Alexander Gruziemberg, y, desde el Monumental de Madrid, interpretaron las Variaciones de Corelli, de Tartini, un Passaglia de Haendel, el Alleluia de Mozart, el Ave Maria de Gounod, Cantabile y Variaciones de Paganini, y el vuelo del moscardón de Rimsky Korsakov.
Por hoy es suficiente. Volveremos a recordar cultura almacenada, pues compartirla es humanizar el tiempo presente.
Alfonso Gil González
