La Asunción de María
Este dogma referente a la Virgen, que significa que, tras su dormición, fue ascendida al cielo en cuerpo y alma, tiene mucho que ver con la Ascensión del Señor. Aquí, ciertamente, Él vuelve al Padre por su propio poder, ASCIENDE. En María, ella ES ASCENDIDA, también, por el poder redentor del Hijo.
Y, para los cristianos y hombres de buena voluntad, es la prueba de que nuestro final no es la tumba. Algunos piensan y viven como si así fuera, pero los hijos de Dios saben que de Él vinieron y a Él han de volver.
Alfonso Gil González